Cómo no hacer software
- Paso 1. Cotizo: haciendo una lista de funciones y cosas que me imagino debe tener el sistema y sin preguntar o consultar con quienes harán el trabajo estimo lo que creo va a costar (en tiempo y dinero) el proyecto.
- Paso 2. Analizo: Y aquí comienza, el calvario para las personas que reciben el brief (si es que por suerte haces uno) del proyecto, nada de se entiende todo causa duda y el cliente enojado empieza a perder la confianza en tí, ¿qué haces? le dices que no está considerado aquello que él te señala como necesario y das una nueva cotización, otro error.
- Paso 3. Diseño. Si llegaste hasta aquí, has logrado convencer a tu cliente que eres mejor que la competencia(o tienes la suerte de que no analizó diferentes proveedores), en este punto no has ganado la confianza sino que tu cliente ha aceptado tu promesa de que harás un buen trabajo. Pero, si con diseño te refieres a diseño gráfico (UI/UX) acabas de dar otro paso en falso. ¿Ya hiciste el diseño y modelado de un sistema siguiendo buenas prácticas? o ¿Entrarás directo al diseño de la experiencia de usuario de TOOOODO el sistema sin saber como sus diferentes componentes se comunican entre sí. Diseñar UI/UX sin conocer el modelo del sistema (con prácticas de ingeniería de software) puede ser potencialmente peligroso sobre todo si tu #cascágil no permite cambios, adaptaciones y volatilidad en los requerimientos.
- Paso 4. Construyo. Si divides todo el trabajo en revisiones periódicas, amigo, déjame decirte que esto no es Scrum, ni ágil de cerca.
- Paso 5. Pruebo. Y sí, revisas el sistema, pruebas aquello que el cliente te pidió y tu caso de prueba solo existe en tu mente y durante tus pruebas resulta que los ingenieros construyeron otra cosa diferente y comienza el retrabajo, la frustración el conflicto. Y… esto nos lleva a…
- Paso 6. Libero. Le enseñas en el ambiente productivo al cliente enseñándole lo hermoso de tu desarrollo pero el cliente interrumpe tu speech: Nada de eso es lo que pedí.
- Paso 7. Y todo tu equipo descubre que, sí, algo logra funcionar pero nada sirve.
¿Algo de lo anterior te suena familiar? Si estas dispuesto a cambiar cómo tu empresa concibe el trabajo y como entregar verdaderamente valor a tu cliente, entonces contáctame.